La vida no se mide en minutos se mide en momentos.
A veces podemos pasarnos años sin vivir en absoluto, y de pronto toda nuestra vida se concentra en un solo instante.

sábado, 19 de enero de 2013

Mente analítica I

Juicio número xxxxxxxx. El estado contra Rubén Ferrán.
(Alguacil) - Todo el mundo en píe, el honorable juez señor x va a entrar en la sala.
El juez toma asiento ante su mesa.
(Juez) - Muy bien, comencemos. Señor abogado defensor, exponga su caso.
(Abogado) - Gracias señoría. Miembros del jurado, tenemos aquí un hombre al que se le acusa de mil tropelías, se le ha tratado injustamente. Demostraré, más allá de la duda razonable, que los hechos acaecidos antes de la fatídica fecha no hacían presagiar un desenlace tan horrendo. Demostraré que a mi cliente le han mentido, le han maltratado psicológicamente. Este hombre que tienen ante ustedes en el banquillo de los acusados es inocente. Y lo probaré con hechos. Los hechos son realidades que sabemos, y en este juicio daré a conocer varios. Luego están los supuestos, que intentaremos clarificar lo mejor que podamos desde la defensa. Espero que escuchen bien, señores del jurado. Estén atentos, la vida de este hombre está en juego.
(Juez) - Su turno señor fiscal.
(Fiscal) - De acuerdo con el señor abogado defensor ese hombre que ven ahí es una alma cándida, un cordero que viene al matadero. ¡Ni mucho menos señores del jurado! No se dejen engañar. La mente de ese hombre es un laberinto enrevesado, ha maquinado ideas fatales, ha ideado planes absurdos, ha pensado en ideas descabelladas. Desde la fiscalía lo tenemos muy claro, ¡Rubén Ferrán es culpable!
(Juez) - Pasemos a llamar a los testigos. Abogado defensor, ¿quien es su primer testigo?
(Abogado) - Quiero llamar a declarar a mi cliente.
Un murmullo suena en la sala. 
(Alguacil) - Ponga la mano sobre la Biblia , ¿jura decir la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad?
(Rubén) - Lo juro.
(Juez) - Muy bien, sólo para que conste en acta, diga su nombre completo.
(Rubén) - Mi nombre es Rubén Ferrán Vázquez.
El juez hace un gesto con la cabeza para que el abogado defensor comience con las preguntas.
(Abogado) - Rubén, relátanos de forma breve lo que sucedió días antes del 14 de Octubre.
(Rubén) - ¿Cuantos días antes?
(Abogado) - Cuéntenos que pasó en Septiembre.
(Rubén) - Fue un mes con tiranteces, con pequeñas discusiones. Pero hablábamos, íbamos a pasear por las tardes, salíamos a dar una vuelta la mayoría de los días aprovechando las últimas tardes de calor estival.
(Abogado) - ¿De que hablaron esos días?
(Rubén) - De todo un poco, de su trabajo, de mis cosas, del futuro.
(Abogado) - ¿Hicieron planes para el futuro?
(Rubén) - Sí, algún viaje teníamos en mente. Ella miró su calendario laboral y vió que tenía un par de puentes y fiestas que podíamos aprovechar para ir a algún sitio.
(Abogado) - ¿Se la veía animada?¿Estaba contenta al planear esos días?
(Rubén) - Yo diría que sí. La veía con ilusión.
(Abogado) - Muy bien, vayamos un poco más adelante. Principios de Octubre. Ahora te ruego Rubén que seas conciso en las fechas. Explícanos que pasó con respecto a esos planes.
(Rubén) - De acuerdo. Decidimos ir en el puente de todos los santos a Burgos. Un par de días. Hicimos la reserva el día 24 de Septiembre.
(Abogado) - Prueba número 1 de la defensa, la reserva del hotel. ¿La hicieron juntos?
(Rubén) - Sí, una tarde. Queríamos ir porque teníamos una noche gratis de un regalo que la hicieron.
(Abogado) - Donde quiero llegar señores del jurado es que vean que mi cliente no tenía, de momento, indicios de la infelicidad de su pareja. Salvo unas pequeñas discusiones, todo induce a pensar que nada ocurría. ¿Algún plan más de futuro?
(Rubén) - Bueno, hablamos durante días de la posibilidad de ir a París en Navidad. Nos gustaba ir allí en esas fechas y surgió la idea. De hecho fue idea suya.
(Abogado) - ¿Llegaron a hacer algún tipo de reserva?¿Fue algo más que una simple idea?
(Rubén) - El 8 de Octubre nos decidimos, me convenció. Yo quería ir también pero andaba algo corto de dinero. Al final compré los billetes ese mismo día. Y al día siguiente reservamos los hoteles. Estábamos muy contentos e ilusionados. La Navidad en París es realmente preciosa.
(Abogado) - Pruebas 2 y 3 de la defensa. Billetes de avión y reserva de hotel de París. Días 8 y 9 de Octubre. ¿Algo más destacable de estos días?
(Rubén) - El día 8 de Octubre me envió un email diciéndome que me pagaba un curso de dirección de cine que tenia descuento por su trabajo. Me gustó la idea pero denegué su oferta, no quería que se gastara ese dinero.
(Abogado) - Prueba número 4, el susodicho email. Vayamos a horas antes del día 14. ¿Pensó en algún momento entre el 9 y el 14 de Octubre que fuera a haber un desenlace como el que hubo?
(Rubén) - No. Jamás lo hubiera adivinado. El día 11, víspera del Pilar, cuando llegó a casa le dije que fuéramos a la feria que ponen en la Vaguada, ella aceptó gustosa. Dimos una vuelta, paseamos cogidos de la mano comentando cosas que veíamos o lo que haríamos al día siguiente. Hubo momentos de silencio, de contemplación. Cómodos, agarrándonos el uno al otro. Volvimos a casa para cenar. Y al día siguiente fuimos a Toledo. No me apetecía demasiado porque tenía que llenar el depósito del coche y estaba intentando ahorrar para gastos que tuve por esas fechas. Pero ella insistió y accedí. Siempre me gustó ir a sitios con ella. Pasamos un buen día, caminando, hablando, comiendo. Nos tomamos un helado en la plaza, observábamos a la gente. Volvimos a casa sobre las 9 y cenamos, vimos una película en la tele y nos fuimos a la cama. Nos dimos las buenas noches como cualquier otro día de los 10 años anteriores.
(Abogado) - Bien, nos acercamos al día D. ¿Qué nos puedes decir del día anterior?
(Rubén) - Poca cosa. No la vi en todo el día. Ella se fue antes de que yo me despertara. Tenía que trabajar por la mañana y yo por la tarde. Cuando llegué a casa por la noche ya dormía. A las 11 de la noche le mandé unos mensajes para saber que planes teníamos para el domingo. Acordamos ir a un parque a pasear. Sus palabras en los mensajes eran cordiales, sin enfado, normales.
(Abogado) - Prueba número 5, mensajes entre el móvil del acusado y su pareja. ¿Y el domingo, como fue el día que te cambió la vida?
(Rubén) - Me desperté temprano, a las 10 creo recordar. Quería quedarme un poco más en la cama y como no sabía si hacia buen tiempo o no para ir a pasear le mande un mensaje y ella me contestó que quería hacer un pastel. Me enfadé un poco porque quería salir y me levanté, y nada más verme me comentó que quería comprar una fregona que necesitábamos. El viernes, dos días antes, le dije que si la comprábamos y dijo que a la siguiente semana. Buscaba pelea. Me conoce y sabe como picarme y lo hizo. Me puse a refunfuñar, nada del otro mundo, y como quería calmarme me vestí y me fuí. Estaba en el portal, y la dije que si no le gustaba como era que me dejara. Ella me tomó la palabra y me dejó. Yo me fui a un banco de un parque cercano a llorar. Hablaba en serio, me dejaba por una pelea sobre una fregona.
(Abogado) - ¿Le dijo ella los motivos de la ruptura?
(Rubén) - Sí, dijo que había llegado al límite. Que no aguantaba más.
(Abogado) - ¿Cree que ella buscó la pelea?
(Rubén) - Si, así lo creo.
(Fiscal) -¡Protesto! ¡Que el acusado crea algo no hace que sea la verdad!
(Juez) - Se acepta. Ruego al jurado se abstenga de tener en cuenta este comentario. Continúe abogado.
(Abogado) - Mi cliente habla de sensaciones, ruego me disculpe señoría, más tarde volveremos sobre este punto. De momento no hay más preguntas.
(Juez) - Espero que pueda probar algo señor abogado. Señor fiscal, ¿alguna pregunta?
(Fiscal) - Si señoría, vayamos al grano. Rubén, ¿qué ocurrió por febrero del 2012? Estaban intentando tener un hijo, ¿no es cierto?
(Rubén) - Sí. Llevábamos intentándolo un par de años y por esas fechas que usted dice ella fue a hacerse las pruebas de fertilidad. Y una tarde, paseando, me pidió que yo me las hiciera.
(Fiscal) - Adjunto como prueba A de la fiscalía el informe del ginecólogo. ¿Qué respondió usted?
(Rubén) - Me negué, dije que no.
(Fiscal) - No quería tener hijos.
(Abogado) - ¡Protesto señoría! El señor fiscal está afirmando una cosa de la cual no sabe la respuesta.
(Juez) - Se admite la protesta. Señor fiscal, haga usted la pregunta al acusado.
(Fiscal) - Muy bien. Rubén, ¿quería usted tener hijos?
(Rubén) - Sí, lo deseaba. Pero tenía miedo de las pruebas, tenía miedo de que el culpable de que no se quedara embarazada fuera yo. Tenía pánico a ser estéril.
Una exclamación del público se escuchó en la sala.
(Juez) - Me temo que se ha hecho tarde, y necesitamos descansar. Mañana continuará su turno de preguntas señor fiscal.
(Fiscal) - Muy bien señoría.
(Juez) - Les convoco aquí mañana para la reanudación del juicio del estado contra Rubén Ferrán. Se levanta la sesión.
El juez da un golpe con su maza y se levanta. El acusado es llevado al calabozo para su confinamiento hasta el día siguiente.

viernes, 18 de enero de 2013

Miedo

Hasta los 13 años viví en Vicalvaro. Un barrio de Madrid que por aquel entonces estaba lleno de gente extraña a ojos de un pequeño chaval.
Yo no era un chico especialmente miedoso con la gente, aunque esta fuera un poquito rara.
Por ejemplo, tenía un amigo que en vez de tener un ojo le habían insertado una bola de cristal. Sí, ni yo ahora mismo me lo creo. Pero es cierto, o al menos es el recuerdo que yo tengo. El chico sacándose el ojo de cristal para mostrarlo a todo el colegio. Interesante visión.
Uno de mis amigos era un gitano, y un día su hermano mayor se acercó a mi y me dijo, "si alguna vez necesitas que alguien te defienda, avísame". Era su forma de agradecerme que jugara con su hermano menor ya que por su condición pocos se acercaban a él.
Otro día a un amigo de mi clase, cuando volvía al cole por la tarde, le mangaron las zapatillas y llegó al colegio llorando porque eran nuevecitas.
Incluso a mi me intentaron atracar también. Iba con mi hermano en bici por un descampado que había cerca de mi casa. Un grupo de cuatro chavales se puso en medio del camino para que nos detuviéramos. El que parecía ser el jefe de los matones me preguntó si tenía hora. Yo, claro, se la dije. Y acto seguido sacó una navaja y nos dijo que le diéramos los relojes y las bicis. Yo tendría unos 11 o 12 años y mi hermano 4 años menos. Viendo que perdía mi preciada bici actué del único modo que pude. Vi una oportunidad de salir de aquella situación. Pasaba un desconocido a lo lejos, bastante lejos diría yo, y se me ocurrió gritar ¡papá!. Al momento le dije a Dani, mi hermano, ¡vámonos, rápido! Y pedaleamos lo más fuerte y veloz que pudimos. Los chavales, distraídos por mi grito y mirando al hombre a lo lejos, no pudieron darnos alcance. A partir de ahora, le dije a mi hermano, cada vez que salgamos en bici aprietate la correa del reloj lo máximo que puedas para que no nos lo quiten.
Como veis, no era un niño que me asustara la gente, de hecho, yo me solía meter en bastantes peleas y más de una vez acababa con las zapatillas en el tejado del colegio por meterme con quien no debía.
Parece el salvaje oeste y por aquella época si que lo era. Vicalvaro era una zona oscura donde en el colegio a parte de jugar a los cromos aprendíamos como abrir una mariposa o lo que era una cheira.
Pues bien, un día sucedió algo inquietante. Un hecho inexplicable.
Cierto día mi madre tenía que salir para comprar. Y mis hermanos se fueron con ella. A mi no me apetecía y le dije que me quedaba en casa viendo los dibujos en la tele. Al poco de irse sonó el teléfono de casa y descolgué. Una voz de hombre sonó por el auricular. Dijo textualmente, "hola, se que estas solo en casa. Voy a ir a por ti.". Después escuché el armario de una de las habitaciones abrirse. Me entró tal pánico que tuve que salir corriendo de casa y buscar a mi madre en la calle. Corrí desesperado hasta encontrarla casi entrando en la tienda y le dije, mamá mejor voy contigo.
Pensé que un espíritu o un fantasma iba a por mi. Sentí auténtico miedo.
Pudo ser una broma de alguien. No se. Pudo ser cualquier cosa.
Lo que me deja impresionado es que reaccionara tan bien con un atraco de verdad, con gente peligrosa que llevaban armas blancas y que una triste llamada me asustara tanto.
Esto me hace pensar que temo más a lo desconocido, lo intangible, que a lo real, a lo que se ve.
Curioso.
Una confesión. Me dan miedo los fantasmas y las apariciones. Son mi kriptonita.

jueves, 17 de enero de 2013

Día D

El desembarco de Normandía.
Hace mucho tiempo, cuando se estrenó, vi la película "Salvar al soldado Ryan". Spielberg rodó unos 45 primeros minutos primorosos. El rodaje del desembarco fue increíblemente realista. Quedé impactado por las imágenes. La fuerza, la crudeza, la brutalidad de algunas tomas, las escenas pasaban sin que pudiera si quiera respirar. Cámara en mano rodó el devenir de los soldados a través de la playa. Salí del cine deseando saber más. Y empecé a interesarme por la Segunda Guerra Mundial.
Nunca me llamó la atención la historia. En realidad la historia que se enseñaba en el colegio o el instituto. Una sucesión de fechas y datos. Sin profundizar demasiado en nada. Supongo que para un primer contacto estará bien, no soy profesor. En fin, que a mi lo que me gusta son las historias dentro de la Historia. Los personajes. Las vivencias.
Unos años antes vi otra película que me hizo pensar. "La lista de Schindler". Me interesé por este hombre, leí la novela en la que se basaba la película, busqué datos, vi documentales. Fue una de las primeras veces que lloré con un filme. Ahí comenzó, en realidad, mi curiosidad por saber más de esta guerra.
Más tarde estuve en la zona de Normandía. Recorrí esas playas. Rememoré las escenas vistas en documentales y películas.
Empecé mi "tour" por Caen. Lugar que durante esa época quedó destrozado. Una ciudad bombardeada y destruida en casi su totalidad. Es una ciudad bonita, todo el norte de Francia lo es en realidad. Pero al recorrer sus calles sientes que todo es muy nuevo, reconstruido.
Después de comer cogí el coche y me dirigí a las playas. Utah, Omaha, Juno, Sword y Gold. Sus nombres en clave.
La Operación Overlord. Recuperar Europa del dominio nazi. Y dentro de esta, la Operación Neptuno. Fue una locura, un suicidio para muchos soldados. Un plan descabellado. Sin embargo, funcionó. A medias, también es verdad. Un plan complejo, con muchos vericuetos. Una batalla naval que implicó a miles de buques de todo tamaño y condición.
El desembarco está lleno de pequeños relatos. Trucos de los aliados por ejemplo. Maniobras de distracción geniales como el de crear tanques de goma. Idea ingeniosa. ¿Quién, en su sano juicio, pensaría que algo así fuera a funcionar? Un ejército inventado para distraer. Y lo más alucinante es que lo alemanes picaron. Relatos de agentes dobles pasando informaciones falsas, datos erróneos en ambos bandos. Debieron ser días de confusión. Decidir en base a algo a lo que no puedes agarrarte. Algo en lo que no confías. Días interesantes para vivirlos desde dentro.
Al llegar a la costa ya notas que allí ocurrió algo grande. Observas los diques artificiales en el horizonte. La sensación al ver las barcas que utilizaron, boca abajo en la playa, con miles de agujeros de metralla o de bombas en sus cascos. Da miedo. Yo sentí terror. ¿Cómo pudieron enfrentarse a eso los soldados aliados? La adrenalina, supongo. Cuando ya estas metido en el ajo mandas todo a la mierda y tiras para adelante con lo que sea. Sobrevivir o morir en el intento. Me senté un rato en una de las playas. Y pensé que todo debió ser enormemente sangriento, para ambos bandos. Me imaginé los aviones aliados atacando las defensas nazis, a su vez los  nazis disparando bombas antiaéreas y con un ojo puesto en los buques de guerra que soltaban cañonazos a diestra y siniestra. Las gabarras llenas de soldados y tanquetas, al mismo tiempo, surcaban las olas producidas por los motores. Los alemanes masacrando a los aliados que se atrevían a pisar la costa, y los que lograban sortear las balas porque un ángel se les puso en su camino caían en las miles de minas diseminadas por la arena. Los ángeles de la guarda tuvieron mucho trabajo ese día.
Hay miles de tributos por toda la zona. A los soldados caídos. Hay estatuas, ametralladoras, tanques, barcos, plataformas, museos, exposiciones. Todo repartido a lo largo de los cerca de 80 km en los que se fraguó la batalla.
Descubres historias personales, tal soldado que se tiró en paracaídas cayó en el tejado de ese edificio, otro valiente murió al atravesar un puente pero consiguió que su unidad lo atravesara, un hombre sin miedo se adentró en el infierno y logró matar a un teniente alemán. Historias con nombres propios que hacen que todo sea más cercano a ti.
Toda la tarde estuve de un lado para otro, respirando un aroma a mar pero con una sensación agridulce. Tenía muchas ganas de ver todo aquello pero, si soy sincero, me dejó un poco triste. Tuve sentimientos encontrados, la excitación de saberme en un sitio fundamental en el siglo XX y la aflicción por darme cuenta de la atrocidades de las que es capaz el ser humano. Sentí pena en el coche de vuelta a Rennes donde estaba mi hotel.
Me atrae. La historia me fascina. La Segunda Guerra Mundial es un cúmulo de relatos, curiosidades, excentricidades, casualidades. Hace unos meses estuve en otro lugar primordial en el desarrollo de esta contienda. Fui a ver la bahía de Pearl. Ya lo contaré algún día. Visitar Pearl Harbor fue un momento trascendental. Quizá nunca hable de ello o quizá lo haga mañana. Quien sabe.
Me despediré hoy con una frase de Tom Hanks en su papel del capitán Miller. "Cada centímetro de esta playa es un objetivo, si os quedáis aquí moriréis".

miércoles, 16 de enero de 2013

Tabata

El doctor Izumi Tabata es el inventor de este método de entrenamiento. Se dió cuenta, mediante una serie de experimentos, que se podía trabajar el cuerpo de forma aeróbica y anaeróbica  al mismo tiempo. Consiste en hacer ocho series de ejercicios de veinte segundos cada uno con un descanso de 10 segundos entre cada serie. Estas deben ser de mucha intensidad, cuantas más repeticiones se hagan mejores son los resultados. Y evidentemente no vale cualquier ejercicio. Debe ser uno en el que se trabajen bastantes músculos a la vez.
Esto, que parece una banalidad, es muy importante. Realizar un tabata bien es algo difícil, muy complicado. Acabas extenuado.
Esta pequeña introducción me da pie a contar un momento. Uno actual. Del presente.
La intensidad es muy importante, hacer cualquier cosa con pasión es fundamental para el éxito. Cuanto más intenso más recompensa.
Estoy avanzando en mi forma física. Es la vez que más orgulloso estoy de mis logros. Siento más flexibilidad, siento más potencia, siento más fuerza, siento más resistencia.
Hay posibilidades de mejora, por supuesto, pero veo avances.
Y la intensidad y la pasión son fundamentales. Hace años entrenaba de forma distinta. Tuve una época en la que, como ahora, me dediqué durante varios meses a cultivar mi cuerpo. Descansaba entre cada serie de ejercicios, los repetía varias veces, era otra filosofía. Ahora no hago repeticiones de series, trabajo de forma intensa, sin descanso. Trabajo el mismo músculo con ejercicios distintos. E intento variarlos. Hacer muchos, y mezclarlos. Primero trabajo abdominales, las distintas partes de estas, la parte baja, los oblicuos. Luego paso a las piernas, caliento un poco, hago estiramientos. Ejército la flexibilidad. Más tarde paso a flexiones, trabajo pecho y espalda. Ganar en musculatura. Vuelvo a hacer ejercicios de abdominales, distintos esta vez a la primera. Luego tocan las mancuernas. Musculación del bíceps, de los hombros, el deltoides, el trapecio, los tríceps, el serrato. Vuelvo a hacer piernas, sentadillas con mancuernas. Y multisaltos si tengo tiempo. Ejercicios pliométricos. Para acabar, de nuevo vuelvo a las abdominales. Todos muy variados. Y sin descansar más que unos pocos segundos entre ellos. Con ello consigo durante una hora y media o dos, dependiendo del tiempo que posea, una intensidad increíble que no deja que piense más que en lo que estoy haciendo. Concentración en cada movimiento, cada flexión de la articulación. Recabo información que me transmite mi cuerpo y varío la carga a la que lo someto. No soy especialista en entrenamientos deportivos, pero si se las sensaciones de mi cuerpo. Y son realmente buenas.
He probado a hacer el tabata con sentadillas y levantado unos kettelbells de 4.5 kg cada uno pero no he conseguido hacer las 8 series. Mi nivel ahora está en 6 series. Pero seguiré intentándolo.
Entreno todos los días, salvo algún que otro día que el tiempo no me lo permite o alguna situación especial. Ayer por ejemplo no pude por algo que contaré después.
En cuanto a lo del parkour, aún no he salido a la calle salvo una pequeña toma de contacto en la manga hace unos días. Quiero ganar en potencia de piernas para poder saltar. No estoy conforme aún con la altura de mi salto. Y estoy aprendiendo a hacer el handstand, por ahora levantado piernas por el método del trípode. Ya me mantengo. Tengo que seguir mejorando. Quiero llegar a hacer giros en el aire. El límite lo pondrá la gravedad y mi fuerza.
Con respecto al día 1 de Enero que dije que quería hacer parkour he subido mi nivel físico. Un avance de 15 días, dentro de dos semanas volveré a hablar sobre el tema. Espero progresar.

Post Scriptum :  Al final no me darán la chapa de la semana sin hablar con ella. Conversación reveladora. Necesaria. Ya no estoy enamorado. No puedo amar a alguien que se quiere alejar de mi. Creo que no hablaré más de ella. Como dijo Ali "soy joven, soy guapo, soy rapido y no seré derrotado....soy mejor que cuando tenia 22. Ahora tengo más experiencia. Me han roto la mandibula, he perdido, me han tumbado un par de veces. Estoy entrenando cosas nuevas, he cortado arboles, he luchado con cocodrilos, peleé con una ballena, atrapé un rayo, puse en la carcel a un trueno. Soy malo. La semana pasada asesiné a una roca, lesioné a una piedra, mandé al hospital a un ladrillo. Soy tan malo que enfermo a la medicina.....y tú me alabarás cuando gane....te mostraré lo grande que soy." Me encantaría tener esa confianza en mi mismo. Intenciones. ¿Realidad?


martes, 15 de enero de 2013

Desintoxicación

Estoy con ansiedad desde esta mañana.
He tenido un sueño maravilloso mientras lo soñaba y horrendo al despertar. Y no logro quitármelo de la cabeza. Un sueño de compensación, lo que no se produce en la vida se hace real mientras duermes.
Me siento solo. Intento no pensar en la soledad, sin embargo mis intentos no fructifican.
Empecé a escribir este blog por no encerrarme en mi mismo, para sacar todo lo que hay dentro de mi. Nunca pensé que nadie me leería y por eso escribí cosas muy interiores, cosas de las que nadie sabe, nadie intuye, nadie si quiera podría adivinar. Mis pensamientos siempre han sido míos, siempre los he guardado celosamente en mi mente. Y ahora necesito hacer un ejercicio de introspección, necesito averiguar quien soy. Y si realmente soy una persona terriblemente egoísta, sin sentimientos, sin corazón.
Estoy en un proceso de desintoxicación. Curándome de mi adicción a la mujer de la que he estado completamente enamorado durante una década. Cada día es una lucha continúa, mi cabeza dice una cosa, mi corazón otra. Durante el terremoto que fue la ruptura dijo de mi cosas duras, hirientes, mentiras que en su mente transformó en realidades. Su punto de vista, claro. ¿Cómo es posible que siga pensando en ella? Es un esfuerzo enorme no escribirla, aún sabiendo que después de romper me ha mentido, aún sabiendo que fue por otro. Iba en el autobús hace apenas una hora pensando en cuando me bañé con ella en Miami, en sus aguas claras llenas de pececillos. En el beso que la di mientras nadábamos juntos. En el abrazo que nos dimos mientras nos decíamos cuanto nos amábamos. ¿Por qué me martirizo de esta forma?¿Por qué pienso en alguien a quien ya no intereso lo más mínimo? Ella toma pastillas para superar, para olvidar. En algún momento tendrá que dejarlas y enfrentarse a lo que su mente le obligue. Sus miedos. Yo dejé de medicarme, mi opinión es que tengo que poder pensar con claridad y las pastillas me adormecen, me dejan k.o., y no quiero ser un muerto viviente. Enfrentarme a mis fantasmas. Y ahí estoy, pasando el mono. El amor es la droga más dura y más difícil de superar. Me llamo Rubén Ferrán y llevo 6 días sin escribirla, podría decir en un teórico grupo de apoyo a modo de presentación. Mañana me darían la chapita de la primera semana, luego la del mes, la del medio año más tarde. ¿Una utopía?¿Soy realista? No se que haré esta tarde, mucho menos que pasará dentro de 6 meses.
Me dicen que tengo que valorarme. Soy lo que soy, no puedo engañar a nadie. Mis obsesiones, mis temores, mis pasiones, todo viene conmigo. Me miro en el espejo y veo a un chico que no esta mal físicamente, pero por dentro esta librando una guerra y esta destrozado, herido, mutilado. Gana batallas y pierde otras. En un momento esta en la colina celebrando la victoria y horas más tarde esta en el foso, cubriéndose como puede del enemigo.
El tiempo va pasando, me hago más viejo día a día. No es que madure sino que mi alma envejece, se hace más dura, menos pasional, la ilusión se esfuma, el futuro se hace oscuro.
Quizá hoy este así por el sueño, el subconsciente me ha traicionado, me ha vendido. He dejado correr mi fantasía durante mi descanso nocturno y eso ha sido la perdición.
¿Cómo se domina a la mente? ¿Pastillas? No creo que sea la solución, más bien un parche. ¿Pensar mal de la otra persona? Lo intenté, pero no pude. Es imposible para mi. Quizá a ella le funcione, a mi me resulta una tarea complicada. ¿Un clavo saca a otro clavo? Injusto para ambos clavos y para mi.
Por ahora lo único que me funciona es el ejercicio físico. Pero la resistencia es finita y no puedes estar sudando todo el día. Hay que recuperar, descansar. Y es en esos momentos de descanso donde mi cerebro clava el puñal a mi corazón. Duele. Intento agotarme lo máximo posible durante la práctica de deporte para que mi mente este cansada y las conexiones sinápticas sean más lentas, que incluso se extingan en los primeros pasos. Pero una vez he recuperado, mi maldito cerebro vuelve a funcionar. Y revisa ideas, preguntas y planteamientos ya desechados.
¿Qué he de hacer? Durante tres meses he revisado en mi mente toda clase de recuerdos, y desde hace algo más de uno los plasmo en el blog. Me ha ayudado. He visto que no soy tan malo, ni egoísta, ni he faltado al respeto a nadie. Mi vida, básicamente, se ha reducido a ir por mi lado sin molestar, sin meterse con nadie, sin inmiscuirme en la vida de los demás. Jamás hablé mal de nadie, ni siquiera de ella, en estos momentos en lo que lo más sencillo sería discutir, pelear, luchar. Me he sumido en un estado de sumisión. Para mi nunca ha sido importante de quien es un libro o un disco, lo esencial, lo trascendental, lo que realmente me preocupa es como ocurrió sin enterarme, sin que ella dijera nada, sin previo aviso. ¿Cómo pudo pasar algo tan demoledor sin ser yo consciente de lo que ocurría?
Eso es lo que no me deja dormir tranquilo. He estado ciego. De haber sabido la realidad, ¿habría actuado de otra forma? Seguramente. Ciertamente sí.
Solo puedo esperar que esto pase. Que el tiempo corra rápido y no se detenga. Nunca deseé tanto que la vida pasara veloz.
¿Vendrán tiempos mejores?¿La tristeza tornará en alegría?¿Existen los milagros? Preguntas sin una respuesta clara.

lunes, 14 de enero de 2013

Tatuaje

El tatuaje es una forma de expresión. Siempre cuenta algo de lo que somos o de lo que nos gustaría ser.
Desde la antigüedad el ser humano se ha dibujado cosas en la piel, por diversos motivos. Bien por cuestiones de poder, bien por misticismo o por distinguirse del resto.
El tatuador es un artista del dibujo, de las formas, de la tinta. Diseñan y transportan del papel a la piel. Mucha presión ya que en el cuerpo no hay margen para el error.
Yo tengo dos tatuajes, uno en cada brazo. Cerca del hombro. ¿Por qué me los hice? Cada uno por distintos motivos aunque tienen algo en común. Ambos son animales alados.
Mi naturaleza soñadora, algo intrínseco en mi, hace que mi mente al igual que mi cuerpo deseen volar. Siempre he admirado la altura. Ver la vida desde una posición superior. Divisar todas las posibilidades. Cuando me hospedo en un hotel siempre pido habitaciones altas, cuando veo un castillo quiero subir a su torre, cuando hay un observatorio en cualquier edificio quiero ascender hasta su cima, adoro viajar en avión y pasarme el rato mirando por la ventanilla, contemplar a vista de pájaro el mundo. Sientes una excitación increíble. Incluso te sientes poderoso. Estas más cerca del cielo y te crees alguien divino. Un habitante del Olimpo. Dejando atrás la arrogancia, me encantaría poder volar.
De pequeño veía una serie en la televisión, "gran héroe americano", en la que un tío se encontraba un traje parecido al de Superman y al ponérselo conseguia tener poderes, entre los cuales estaba volar. Yo imaginaba que era él y que tan solo dando esos fantásticos tres pasos me lanzaría en un vuelo increíble. Y probaba en mi habitación dando saltitos pero a lo más que llegaba era a planear hasta el suelo desde mi corta estatura. Imagen infantil y graciosa pero clarificadora. Desde tan corta edad ya pensaba en surcar los cielos.
El primer tatuaje que me hice fue un dragón alado en el brazo izquierdo. Un ser mitológico.
Estaba decidido a hacerme un tatuaje, y sabía que quería algo con alas. Pero no sabía que exactamente. Fue en el estudio de tatuajes, donde mirando dibujos, lo vi. Me llamó poderosamente la atención. Un dragón, eso era lo que buscaba. El chico que atendía se puso a mi lado y me dijo, ese es uno muy bueno y es un diseño propio, la autora está hoy por sí quieres hacértelo. Y no me lo pensé dos veces. La chica era un genio. Lo hizo perfecto. Cuando un par de años más tarde fui al mismo lugar para hacerme el segundo, el tatuador se quedo alucinado de la perfección del primero. De los detalles. Un trabajo de diez. No sabía nada sobre dragones, su universo mitológico era desconocido para mi. Aún así fue una imagen que me atrajo y por eso la elegí. Con este primer tatuaje quería demostrar al mundo que mi felicidad estaba en dejar volar mi imaginación, deseaba soñar en un momento de mi vida difícil, complicado.
El segundo, como ya he comentado, decidí hacérmelo un par de años después. El motivo era distinto. Los animales alados para mi tienen un significado muy claro. Libertad. Un pájaro puede desplazarse a cualquier lugar del planeta, alzar el vuelo y disfrutar de algo que mucha gente no posee. El placer de sentirse libre, sin ataduras ni a lugares ni a ideas. ¿Y que pájaro simboliza claramente esto? Quería un águila. Alas poderosas, fuertes patas, pico que infunde temor. Es el rey del cielo. Deseaba que cualquiera que viera mi tatuaje supiera que mi lema es la libertad personificada en ese águila.
Llegué al estudio y me puse a ver diseños y al igual que con el primero, en cuanto lo vi me enamoré de él. Un águila con la palabra "liberty" entre las patas. Ese era. La letras redundaban en la idea que tenía en mente, por si alguien no entendía el por qué. Había un problema, el águila tenía entre las alas unos arcos y en el interior no había nada. Tenía que decidir que poner dentro. Como no lo tenía claro, el chico me dijo que lo dejara vacío y que cuando supiera lo que deseaba me lo tatuaría. Ese pequeño hueco aún sigue en mi brazo. Como detalle curioso he de decir que lo quería en la espalda. Uno grande, muy grande. Que las propias alas del águila parecieran ser las mías. Sin embargo, el diseño que elegí hubiera quedado mal a una escala mayor y acabamos decidiendo, entre el artista y yo, que lo mejor sería el brazo. Así tendría las alas del dragón en un lado y las del águila en el otro. Dos emperadores de los cielos que sostendrían mi vuelo.
Hace dos meses decidí que quiero un tercero. No estoy tan seguro como con los otros dos. Debido, claramente, a que no estoy seguro de nada en mi vida. Pero deseo marcar este instante en mi cuerpo. Quiero mirarlo cada mañana al ducharme y recordar lo que soy y lo que deseo ser. Y como no podía ser de otra forma quiero alas. He pensado en un fénix. Otra criatura surgida de los mitos. ¿En qué lugar debería estar? Sin duda en el pecho, en el corazón. Aún no he ido a mirar dibujos porque se que sí alguno me atrae me lo haré en ese mismo instante. Quiero rumiar la idea un poco más. Probabilidad del tercer tatuaje, 75%. Probabilidad de volar, 50%. Probabilidad de soñar, 25%. Probabilidad de amar 0%.
Meras posibilidades, cierto. Y como todas ellas llevan consigo asociadas un error. Espero equivocarme. Deseo creer en la falsedad de mi premisa. Deseo poder amar.

domingo, 13 de enero de 2013

Domingo

It's a new dawn, it's a new day, it's a new life for me and i'm feeling good.
Hoy voy a ser corto. Breve.
Voy a hacer ejercicio. Veo una amplia gama de colores, no solo grises.
Sintonía entre mi cuerpo y mi alma.
Ya veremos dentro de unas horas, ahora aprovecharé este momento de exaltación y fuerza.